jueves, 4 de noviembre de 2010
Marcelo Carnero
Y de nuestros días recuerdo
el olor de las naranjas incendiando las tardes
ahora que nos cerca la sed
su trufa de vinagre
Hemos estado por siglos contra las médulas de agua
resguardándonos del paso de la vida
como ídolos precarios
piel y hueso
Aunque nos hayan desterrado a las palabras
prefiero amanecer
bajo la lluvia.
***
Viene el silencio
y yo
un esposo lúgubre
viento decapitado de su chispa
llamo a clavar mi lengua
gruesa como una esponja bajo la lluvia
Mi santidad
es una ojiva entre las manos.
***
Hurgar con boca abierta
la usura
y no saber qué hacer con el amor
¿De la piedra
en la piedra
siempre hay una palabra?
No sólo la memoria se aprende.
***
El gas dulce
que derraman las lámparas
nos envuelve la siesta de paredes
los tomates de sangre
crepitan en los cántaros
la máscara de enero
en las mejillas.
De Sentido de la oración (Editorial Abeja Reina, 2010)
Nota:Marcelo Carnero nació en Buenos Aires el 22 de abril de 1978. Publicó Tratado de cuerpo (Ediciones La Carta de Oliver, 2008) Sentido de la oración (Editorial Abeja Reina, 2010).
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los dos versos del primer texto!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarenormes
este vato no tiene algo en la red? un bló?
saludos
Este es mi blog: www.tratadodecuerpo.blogspot.com Saludos!
ResponderEliminarMarcelo Carnero
Qué bellas letras las tuyas, Marcelo: cuidadas palabras y fantástico ritmo. Enhorabuena.
ResponderEliminarAnotado tu blog. Saludos!
Muchísimas gracias Mónica! Saludos!
ResponderEliminarMarcelo Carnero
hermosos textos, el primero, sobre todo, es magnífico
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