martes, 2 de marzo de 2010

Claudia Sastre




Es un punto ciego donde pido


captura por el nombre
de infancia y parentesco
Idiota del medio
todavía firmo
de puño y letra
las palabras de la tribu




Allí soy

quien camina
entre los dormidos.
Nadie cae
desde la altura de sí mismo.
No hay altura.
Todo es altura.
No hay donde caer.
Allí practico el paso mórbido
del silencio.
El paso del poema.
Camino entre los dormidos
y soy
uno más con ellos.
Uno más entre los silenciosos



Nadie se enamora de mí

desde que dejé
la voz en un poema.
Hacen que me tosa lo tragado
por las borraduras
orfandad
de los lápices filosos.
Tengo un nombre para madre
no hay nadie afuera del poema
/ un nombre
bordado en los columpios
y no hay nadie dentro de él



Asistimos con mis hijos


al parto
de mis padres
nos dolimos juntos
hasta bien nacernos.

Somos lo que empieza
y termina
con nosotros



I.

Desde Seychelles, pasando a Mogadiscio
por Zanzibar, él hablaba
de los aceites fragantes
en los negros cuerpos
de los olores de Madeira
y en Ormuz, y en el Cabo
con jazmines, relataba
a Tambora de los puertos, recordando
en cada una de sus marcas, que el mar
estaría siempre allí



3.

No quieren que vague
desnuda
por altas galerías
donde saben que estos pasos
me llevarán
a dormir entre los locos.
Blancos paños de lumbre
me aplican
sobre las heridas.
Sólo mis hombros lacerados
soportan
el ruido del deseo.
Conozco el baúl
donde se guarda
la escarcha de la novia
los azahares encendidos
para su frente insomne
la espalda
iluminada por la fiebre
el vaso que espera
sobre la mesa
sal de anfetaminas
que tendré que beber.
120
No quieren que palpiten
estos ojos
porque sé que en la alberca
tanta agua se atormenta
y los peces furiosos
se retuercen
saciándose de amor.

Nota:Nació en La Plata y vive en Puerto Madryn desde 1979. Esta activa militante de las letras fue la impulsora del café literario que desde el Pub la Oveja Negra en la ciudad del golfo convocó a poetas, músicos y todo aquel de sensibilidad suficiente como para reconocer el llamado de una manifestación artística. Hoy lo hace desde La Barca, otro proyecto cultural de similares características al anterior. Se trata de espacios bien ganados a la liviandad y las variables económicas. De igual modo y con similares intenciones, fue editora de "La Hojita", un suelto de arte y poesía de aparición esporádica y "cuandosepuede" (como siempre sucede en nuestro país) cuyo objeto tuvo una razón de hierro: que la lírica circule, camine y se meta donde haya espacio para que su voz diga lo que tiene para decir sobre la belleza y la verdad. Hacia finales de octubre o principios de noviembre saldrá de imprenta la edición de "Faúnicas", un libro de poemas de singular belleza y despojado lenguaje cuyo atractivo reside en la imagen que sueltan sus palabras y en el hilo conductor que sostiene su temática. En el mes de agosto, Claudia Sastre fue premiada por la Dirección de Cultura de Bariloche (Neuquén) y la revista literaria "Espejos del Alma" por su trabajo poético. Obras: "Instrucciones para morir" (inédito); "La lengua derrotada" (inédito); "Nanacatum" (inédito/novela); "Maldito viento del oeste" (inédito/novela, en corrección).

1 comentario:

  1. Por aquí te encuentro... el viento de primavera hizo su búsqueda. Viajera nos dicen entre aquellas que no se reconocen.
    ¡Un gran felicidad la mía, el encontrarte por aquí!

    ResponderEliminar